El equipo de Duda cae por 5-2 ante el Peñíscola, y queda varado en los cuartos de final de la Copa del Rey. La Final Four se jugará en Cartagena, sin Jimbee ni ElPozo.
GREGORIO LEÓN
El Jimbee no podrá ganar en su pabellón la Copa del Rey. La Final Four de este torneo prestigioso se jugará en Cartagena, pero el Peñíscola le torció el destino al equipo de Duda, que habitualmente se ha desenvuelto con altísima fiabilidad en este tipo de situaciones. Pero malgastó una ventaja preciosa de dos goles y vio cómo el rival le remontaba. El Jimbee, de los últimos veintiséis partidos jugados, excluida la Liga, solo había perdido uno (ante ElPozo) en el tiempo reglamentado. Hasta ahora. La experiencia que le había salvado otras oportunidades no fue suficiente ante un conjunto, el castellonense, bien adiestrado por Santi Valladares, que le respondió con la misma arma: pegada y competitividad.
El Jimbee fue paciente y esperó su momento para asestar las primeras puñaladas al rival. Y fue Motta, el jugador que otras veces ha castigado al Peñíscola, quien volvió a golpearlo. Los veces. 0-2 era una ventaja más que notable. Pero el cuadro castellonense también encontró la portería de Chemi. Quintela firmó el 1-2. Y Paniagua, con una jugada extraordinaria, cruzando la bola a un ángulo imposible del Jimbee, colocó el empate. Y cuando solo quedaban cinco segundos para el descanso, luego de un saque de esquina, Diego Sancho enchufó el 3-2. El Peñíscola volteaba la situación. Ese gol fue muy dañino. Mucho.
La segunda parte comenzó mal. Elías lanzó desde muy lejos y Chemi, en un fallo impropio de su calidad, se la tragó. 4-2. El tiempo fue pasando y Duda se vio obligado a sacar el portero-jugador. Pero Peñíscola fue enérgico en la defensa de esta solución táctica instrumentada por Duda, y anotó el quinto al borde del final.
