En el último año el desempleo acumula un descenso de 8.309 parados, lo que supone un 9,23% menos, según los datos del Ministerio
El número de parados registrados en las oficinas de empleo de la Región de Murcia bajó en abril en 1.702 personas, 1.025 de ellas del sector servicios, que acumula aún así el mayor volumen de desempleados murcianos, con 54.294 del total de 81.727 registrados en esta comunidad a finales del mes pasado.
Según ha informado este lunes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el paro bajó un 2,04 por ciento en términos mensuales y un 9,23 por ciento respecto a 2023 al haberse computado 8.309 desempleados menos que hace un año.
Del total de parados murcianos, 9.935 son extranjeros (1.943 comunitarios y 7.992 de terceros países) y, en ese colectivo, el desempleo bajó un 3,59 en términos mensuales (-3.701 parados) y un 11,03 por ciento respecto al año pasado (-1.232).
Por sectores de actividad, la agricultura murciana suma 4.316 parados (-217 sobre marzo); la industria, un total de 8.039 (-128), en tanto que en la construcción hay 6.156 desempleados (-151), en el sector servicios son 54.294 parados (-1.025) y en el colectivo sin empleo anterior la cifra asciende a 8.922 (-181).
Asimismo, entre los extranjeros, el paro agrícola suma 1.259 trabajadores; el industrial 524; la construcción (529), servicios (5.075) y sin empleo anterior (2.548).
En cuanto a los contratos, en abril se firmaron 56.471 contratos de trabajo en la Región de Murcia, con un incremento del 26,18 por ciento en términos mensuales (11.717) y del 7,49 por ciento en cómputo anual (3.934). Del total de contratos, según el Ministerio, 30.900 fueron indefinidos y 25.571 temporales, con un incremento de los primeros del 19,48 por ciento respecto a marzo.
El mayor volumen de la contratación de lo llevó la agricultura, con 25.930 de los 56.471 contratos firmados en la Región en abril; seguida de servicios (24.254), industria (4.240) y construcción (2.047).
La Región de Murcia ha experimentado un aumento en el número de afiliados a la Seguridad Social de un 1,15% en abril, al registrar un aumento de 7.507. Así la región acumula un total de 660.331, cotizantes más en comparación con el mismo mes del pasado año (un 2,93%).
De este total de afiliados de la comunidad autónoma, 459.821 lo son en el Régimen General --85.865 en el Régimen Especial Agrario y 10.091 en el del Hogar-- y 103.532 en el de autónomos al término del pasado mes, según las cifras presentadas por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
En el conjunto del país, la Seguridad Social ganó una media de 199.538 cotizantes en abril respecto al mes anterior (+0,95%), gracias, sobre todo, al impulso de la hostelería, que sumó casi 92.000 afiliados en el mes.
Tras el incremento de ocupados registrado en el cuarto mes del año, superior a otros abriles donde no se celebró la Semana Santa, el número de afiliados medios se situó en la cifra récord de 21.101.505 ocupados, llegando incluso a tocar en algunos momentos del mes los 21,2 millones de trabajadores.
El aumento de afiliados de abril es uno de los más elevados de la serie. No supera el de 2023, cuando la Semana Santa llevó al sistema a ganar más de 238.000 ocupados, pero en comparación con otros meses de abril sin Semana Santa, el crecimiento de este año ha sido superior.
La Comunidad Autónoma ha destacado este lunes que el mes de abril dejó en la Región de Murcia un total de 1.702 personas desempleadas menos, lo que supone una caída del paro del 2,04 por ciento respecto al mes de marzo, y la cifra "más baja" de desempleados desde hace 16 años. Mantener esta tendencia de crecimiento del empleo es lo que espera el consejero del ramo Víctor Marín. Son buenos datos también para el responsable de estudios de CROEM, Jesús Maeso. La situación de Murcia respecto de otras comunidades y el elevado número de contratos indefinidos son los elementos que subraya.
Sin perder ese mismo tono optimista ante los resultados del paro de abril, Ascensión Ludeña, secretaria de empleo de UGT, señala que la región sigue manteniendo niveles altos de precariedad fruto de los bajos salarios. En el mismo sentido, Víctor Romera, secretario de empleo de CCOO, apunta la necesidad de cambiar de modelo productivo, apostando por aquellos sectores que aumentan la competitividad.