Algunos frutales de la Vega Alta habían comenzado a florecer. El frío favorece la hibernación y que los árboles completen su proceso biológico
CLAUDIO CABALLERO
El frio ha llegado también a los campos de la Vega Alta y a los frutales, que precisan de bajas temperaturas para poder hibernar y completar su proceso biológico. En algunas fincas, los árboles ya habían comenzado incluso a florecer.
Las organizaciones agrarias han valorado de forma muy positiva la llegada de las bajas temperaturas, puesto que supone la ralentización de los frutales. Se da la circunstancia de que el clima suave de las últimas semanas había proporcionado que algunos árboles comenzaran a florecer, como indica el presidente de COAG Cieza, Miguel Ángel Piñera.
Por su parte, el secretario de Agricultura de UPA Antonio Moreno, se congratulaba también de la llegada de las bajas temperaturas y auguraba, al menos de aquí a final de año, unas mañanas con el mercurio bajo cero en los campos de Cieza y comarca.
Los agricultores esperan ahora que el invierno y sobre todo el comienzo de la primavera haga llegar la esperada lluvia a los campos.